La higiene dental no es lo único que puedes hacer para mantener tus dientes sanos. La alimentación cotidiana también tiene mucho que ver con la salud bucodental. Hoy nos centramos en los alimentos que te ayudan a mantener tus dientes más saludables.
Proteínas. Los alimentos ricos en proteínas reabastecen las células del cuerpo y con ello contribuyen a un mejor flujo sanguíneo hacia las terminaciones nerviosas, que también se encuentran en el interior de los dientes. Si sigues una dieta vegetariana, puedes consumir huevos y leche de soja para incrementar el aporte de proteínas.
Frutas ácidas, sobre todo manzanas. Este tipo de fruta con sabor ácido favorece la producción de saliva. Y la saliva es una gran aliada de la salud bucodental porque mantiene la humedad, dificultando la formación de la placa bacteriana, que suele se la principal razón de las enfermedades de dientes y encías como la caries o la gingivitis.
Vegetales crudos, en especial apio o zanahoria. Son vegetales más duros y algo “crocantes” que favorecen la limpieza y estimulación de las encías.
Vitamina C. Si en cuanto a frutas y vegetales de los apartados anteriores, eliges aquellos con mayor aporte de vitamina C, como son los cítricos, la papaya, el brócoli, el pimiento rojo, las coles de Bruselas, la col rizada o los berros, estarás además contribuyendo a la formación de colágeno que mantiene la densidad ósea, y facilita la cicatrización, dos ventajas muy interesantes para tu boca.
Calcio, que se encuentra en todos los lácteos, pescados azules, marisco, legumbres y frutos secos. El calcio es un mineral esencial para el correcto desarrollo de los dientes (y también de los huesos). Su carencia puede producir periodoncia y pérdida de piezas dentales. Si sigues una dieta vegana y tomas leche de soja, elige una variedad reforzada con calcio.
En resumen, para tener una boca sana, no solo debes cuidar tu higiene dental, también tu alimentación.